En lo que refiere a la fabricación, la elaboración y la restauración de muebles, podemos pensar que un carpintero o un ebanista cumple la misma función.
Desde Alarce te explicamos cuál es la forma de trabajar de cada uno y en qué se diferencian.
El CARPINTERO Y EL EBANISTA: ¿QUE LOS HACE DISTINTOS?
La ebanistería es una profesión que utiliza conocimientos y prácticas de antaño, orientada a la elaboración y la restauración de muebles de madera de una manera artesanal.
El término ebanista surge en Francia en el siglo XVII para diferenciarse del carpintero, que trabajaba con maderas más comunes y asequibles.
Tal es así, que la palabra proviene de “ébano”, un tipo de madera originario de África.
En la actualidad, gracias al uso de la tecnología y las últimas novedades relacionadas con el tratamiento de las maderas, es posible diseñar mejores muebles sin perder su base artesanal.
Esto significa que un ebanista fabrica y restaura muebles más elaborados que el carpintero.
A su vez, puede complementar su labor con otras técnicas artesanales como el tornado, la talla o la marquetería.
Dicho en pocas palabras, la ebanistería nos aporta muebles de mejor calidad y diseño.
El arte de un ebanista requiere mucha práctica y conocimiento de geometría para realizar los trazados.
Un ebanista puede inventar formas que respondan a las necesidades de los clientes sin limitarse a lo típicamente tradicional.
Por otra parte, la carpintería es el nombre que refiere al oficio que trabaja y corta la madera y sus derivados. Estamos hablando de una de las prácticas más antiguas del mundo.
Su nombre proviene de la palabra “carpenter”, cuyo significado sería “creador de carruajes”.
Tanto el ebanista como el carpintero deben de ser capaces de distinguir entre los diversos tipos de madera y también conocer las técnicas básicas de unión, de ensamblaje y las de acabado.
EBANISTERIA Y CARPINTERIA: DIFERENCIAS Y SIMILITUDES
La madera está presente en nuestras vidas en todo momento, material trabajado tanto por carpinteros como ebanistas.
Podemos destacar similitudes y diferencias entre ambas labores como las siguientes:
Los objetos que produce. El ebanista, en esencia, se dedica a la fabricación y/o restauración de muebles o elementos de decoración interior.
En cambio, la carpintería incluye el trabajo con madera de elementos externos como internos. Entre ellos, ventanas, estructuras, revestimientos, objetos cotidianos, etc.
En este sentido, podemos afirmar que el ebanista en un carpintero especializado en realizar exclusivamente muebles o restaurarlos.
El diseño y la apariencia externa de los objetos de ebanistería son clave. En cambio, los objetos de carpintería se definen por su funcionalidad.
Diseño y acabados. Los ebanistas suelen tener el control en el arte de la decoración de la madera en sus diversas posibilidades.
Presentan piezas más elaboradas, con acabados exclusivos, más delicados y finos.
La carpintería ofrece muebles y acabados de calidad, aunque más sencillos. No profundiza en adornos o detalles que exijan técnicas extras de decoración de la madera.
Los materiales. En general, el carpintero es experto en el trabajo de maderas más comerciales y asequibles.
Los ebanistas trabajan con maderas nobles y naturales, que exigen técnica manuales y más lentas, convirtiéndose en verdaderos trabajos de artesanía.
Algunas pueden tener de un alto valor económico para lograr crear piezas únicas y exclusiva donde el diseño es fundamental.
La técnica. En el caso de los carpinteros, controlan técnicas más comunes de trabajo de la madera como el corte y el ensamblado. A menudo utilizan clavos, grapas, adhesivos, etc.
Los ebanistas son expertos en trabajos exclusivos y minoritarios.
Sus técnicas son la marquetería, el tallado o el pirograbado que les permite crear piezas de madera que son verdaderas obras de arte.
Para concluir, podemos afirmar que los ebanistas conocen en profundidad el arte de la madera, en tanto los carpinteros conocen mejor la parte estructural y arquitectónica necesaria para construir elementos de madera.