Comenzó el otoño y con él, el momento perfecto para darle una nueva cara a la decoración de tu hogar.
Los muebles restaurados tienen múltiples ventajas que van desde la reutilización ecológica hasta la conservación de recuerdos familiares, pero sobre todo son una tendencia en la decoración.
Si tienes la oportunidad de obtener muebles conservados a precios muy económicos y cuidar el medio ambiente, entonces aprovecha.
Hoy desde Ebanistería Alarce te daremos algunas claves para lograr que tus muebles restaurados se vean como el primer día, unos trucos para conservar tus muebles restaurados.
COMO CONSERVAR UN MUEBLE RESTAURADO
Para conservar un mueble restaurado tienes que tener en cuenta algunos puntos básicos:
- Evita que el mueble restaurado esté cerca de fuentes de calor y humedad, como paredes con filtraciones o calderas.
- No permitas que el mueble este expuesto al sol directo, ya que podría quemarlo y así perdería el color.
- Mantén siempre limpio el mueble con un paño y los productos específicos tu mueble, si es posible, con los que te hayamos recomendado tras la restauración.
Estas recomendaciones son básicas para mantener un mueble en perfecto estado, pero uno de los puntos específicos más importantes es la limpieza.
Este aspecto será el que sostenga el mueble como nuevo a través del tiempo, pero también el que logrará que puedas incluso heredárselo a tus hijos sin que tenga que volver a ser restaurado.
COMO SE LIMPIA UN MUEBLE RESTAURADO
Para limpiar un mueble restaurado lo esencial es que tengas dos cosas: conocimiento de cómo hacerlo y los materiales de calidad correctos.
Es así que tienes que tener a mano un limpiador suave, ya que así mantendrás el mueble libre de daños. Algunos consideran que un detergente diluido en agua como una opción segura para que la superficie se limpie, pero sin arruinarla con abrasivos.
Para mantener el brillo de los muebles restaurados de madera, algunos expertos consideran que la cera en pasta es una excelente opción. Si tienes dudas respecto a cuál comprar, entonces te recomendamos que recurras al profesional que restauró tu mueble, ya que te podrá asistir para elegir marcas, por ejemplo.
Limpiar un mueble restaurado es una tarea que requiere de paciencia. Tienes que utilizar un paño suave, mojarlo con un poco de limpiador suave y frotar suavemente hasta librar el mueble de la suciedad.
Recuerda no restregar, ya que eso dañaría el acabado y, en cambio, utiliza movimientos suaves y mueve el paño en dirección a la veta de la madera.
Qué hacer en caso de manchas en tu mueble restaurado
Una de las grandes pesadillas de los amantes de los muebles restaurados son las manchas, especialmente las pegajosas. Para lograr eliminarlas y así conservar el mueble restaurado, tienes que utilizar una esponja de lana de acero.
Para trabajar sobre la mancha, recuerda hacer movimientos suaves en dirección a las vetas de la madera y no aplicar fuerza, ya que esto podría dañar el acabado del mueble.
En algunos muebles puede que sea difícil llegar a algunas áreas para limpiarlas con paño o una esponja de lana de acero. Para lograr limpiar rincones o curvas de un mueble utiliza un cepillo de dientes con solución limpiadora, siguiendo las mismas reglas que ya hemos mencionado.
Importante: No mojar el mueble restaurado
Lo máximo de líquido que debería tocar tu mueble restaurado es el líquido limpiador. Una vez limpio, debes dejarlo secar o pasarle un paño seco absorbente, pero nunca utilizar ninuna otra forma de secado.
Una vez esté completamente seco, el mueble debe ser pulido con un producto que te hayamos recomendado. Así lograrás que brille y se mantenga con mejor apariencia durante más tiempo.
Jamás permitas que tu mueble sea tocado por agua, ya que eso es uno de los motivos más comunes para arruinar un mueble restaurado. De igual forma, probablemente también te recomienden que lo mantengas lejos de la luz del sol, ya que los rayos ultravioletas son nocivos para el brillo y resistencia de un mueble de madera restaurado.